martes, 31 de mayo de 2011

Muerte al Amanecer

(Dirigida por Francisco Lombardi – Perú 1977) Corre el año 1957 y el teniente Molfino (Gustavo Rodríguez) con sus hombres llevan un ataúd hacia una embarcación llamada “La América 1869”, ubicada en la orilla del Callao. Debe ser mediados de año, porque el cielo está gris. Muchos curiosos observan en el puerto chalaco lo que viene aconteciendo. La embarcación inicia su rumbo hacia la Isla de El Frontón. Por aquellos años esa isla es utilizada como una prisión.

Echenique (Jorge Rodríguez Paz) es el director de la prisión, un tipo de carácter duro. La mujer de Echenique (Sylvia Gálvez) es una hembra de caderas anchas y de buen ver (en el pasado ella ha sido bailarina). Los militares que cuidan la prisión se deleitan con mirarla, así como lo deben hacer los choros y toda la lacra cuando la ven caminar. A la mujer de Echenique le gusta escuchar en la radio la música de moda, desde un mambo hasta un bolero de Daniel Santos como “En el juego de la vida”.

Se hace de noche y Echenique prepara el lugar donde al amanecer siguiente se va llevar a cabo un fusilamiento. El teniente Molfino llega a la Isla, hace una inspección del lugar a donde va llevar su pelotón al día siguiente y luego visita al Monstruo (William Moreno). Ambos se miran, mantienen un largo silencio hasta que Molfino le pregunta si necesita algo. El Monstruo sólo le responde: Usted me va matar ¿no?. Usted va fusilarme con el pelotón.
Molfino se retira medio mortificado.

Mientras tanto una nueva embarcación “El Titanic Callao” está por llegar a la Isla con personalidades muy importantes como el Director General de Justicia, El Juez con su escribano, el médico forense, entre otros. Estos hombres llegan a la Isla y de inmediato van a hospedarse a la vivienda de Echenique. La mujer los recibe con mucho coqueteo, los hombres sonríen y al rato están rajando de ella. Quien se la ha comido antes y quien no. Cuando llega Echenique, cambian el rumbo de la conversación y se ponen serios para hablar del asunto de la mañana siguiente. Echenique les dice a las autoridades:

Echenique: El Monstruo es un cínico que repite que es inocente. Aquí viene lo peor de la sociedad. Todos los degenerados, la peor gente de los tugurios, la zambería más podrida de los bajos fondos. En fin, lo más bajo viene a terminar su vida en esta isla y yo podría estar acostumbrado a la maldad, pero no. Eso si, los conozco a la primera mirada. Y señores, como el monstruo nunca he visto a nadie.

Echenique: La ventaja de esta isla es que de aquí nadie se escapa. No valen túneles ni sogas. Algunos trataron de fugarse a nado y se ahogaron, la corriente los arrastra mar afuera o contra las rocas. La parte posterior de la isla es ufff unas olas enormes y puro precipicio.


Las autoridades le dicen que el fusilamiento es importante para frenar la racha de violaciones de niños. Cuando se sientan a la mesa para la cena, las autoridades comentan el crimen del Monstruo. Que un turronero fue el único testigo. Que el monstruo confeso su delito y reconstituyo los hechos del crimen. Que en la cueva fue cometida su monstruosidad. Una de las autoridades tiene dudas de cómo se llevo el proceso. El juez le resuelve sus dudas con cierta inseguridad.

Las horas pasan y los invitados en vez de descansar, se dedican a tomar licor. El teniente Molfino va en busca del Monstruo con los primeros signos del amanecer. El monstruo le dice a Molfino unas palabras que lo dejan impresionado y justo en unos minutos más va ocurrir el fusilamiento.

Lombardi en su primera cinta ya nos va mostrando su interés por contarnos historias basadas en hechos reales acontecidos en el Perú a lo largo de su etapa republicana. Los diálogos de las autoridades son la carnecita del filme. Para destacar la actuación de Jorge Rodríguez Paz, a quien veremos luego en casi todos las cintas de Lombardi. Para mí su mejor participación, en “Bajo la piel”, mi película peruana predilecta.

El Pecador de los 7 Mares

(Dirigida por Aldo Salvini – Perú 1992)

El amor es benigno, Padre Ángel, ya lo olvido. Todo lo cree, todo lo soporta, nunca abandona, nunca miente, nunca traiciona.
En lo que queda de un barco en desuso, entra un viejo borracho (Enrique Victoria). Lleva una maleta en la mano y en el bolsillo de su chaqueta una botella de licor. Toma un poco de la bebida, cuando de pronto escucha la voz de un hombre que le da la bienvenida a esa especie de barco fantasma. Tiene miedo, quiere escapar. El hombre (Aristóteles Picho) es un cortadito (no tiene piernas) que le ofrece un caldito levanta muertos. Accede a quedarse para llevarse más bebida a su cuerpo.

Viejo: ¿Quién eres?
Cortadito: “Sombras nada más entre tu vida y la mía ….”

Nuevamente el viejo quiere marcharse. El cortadito le ofrece pisco puro de chacra. El viejo nuevamente se queda. El cortadito quiere la maleta del viejo. Este no quiere abrir su maleta, es más piensa que el cortadito es el demonio que se lo quiere llevar al infierno.

Las luces de pronto se ponen de colores y el cortadito dice:

Cortadito: Señoras y señores su local favorito “Los 7 mares” se complace en presentar a la emperatriz, a la diosa del bolero Estela Corazón, el amor de Ángel Santa Cruz.

Con unas luces azules de fondo y otras moradas que le dan al rostro, aparece una mujer trigueña muy sensual que lo mira al viejo borracho. La mujer le dice que quiere dedicar esa canción para el hombre que le enseño el verdadero sentido del amor, Ángel. Luego agrega que la canción se llama 1000 besos y empieza a cantar.

He encontrado en tu amor
la fe perdida
ahora tiene mi vida
una razón
que le dijo a tus labios

robale el corazón
Yo se que en los mil besos
que te he dado en la boca
se me fue el corazón
Si dicen que es pecado
querer como te quiero
quizás tengan razón


El viejo borracho se acerca a ella, la abraza y le dice que siempre la ha amado. El cortadito aprovecha para abrir la maleta. Ahí descubrimos los pecados del padre Ángel.

Interesante cortometraje con final inesperado de Salvini. Una actuación alucinante de Aristóteles Picho y Enrique Victoria.

Domingo

(Dirigida por Hugo Shinki – Perú 2004)

Es un domingo soleado cuando Carlos (José Infante) se entera que ha nacido su hijo, lo primero que se le ocurre es que lleve el mismo nombre de ese precioso día. Carlos se desempeña como mecánico de un taller de autos, su esposa Micaela (Fátima Salmonid) se dedica a la casa y es una excelente cocinera.

Conforme el niño va creciendo, sus padres se dan cuenta que Domingo muestra mucho interés por hacer oraciones, es su manera de estar cerca de Cristo. Por otro lado dice que para resolver los problemas le pide ayuda a Dios y todo se hace facilísimo. El Padre Juan (Javier Echevarría) piensa que ese niño está destinado a algo especial. Va donde los padres y les propone que Domingo ingrese al Internado de la Casa de Don Bosco para velar por su educación y crecimiento cristiano.

Los padres aceptan y así Domingo inicia sus estudios. El muchacho en su accionar diario gusta de ayudar a sus amigos sin que se lo pidan, no es de guardar rencor a nadie y tiene mucha fuerza de voluntad. Un día conversa con el Padre Juan y le dice que él quiere ser santo. El padre Juan le responde que santo es el que ayuda a los demás, que santos podemos ser todos y que no vea la santidad como un fin sino como una forma de vida. Pasan los años y un ya púber Domingo (Emanuel Soriano) sigue con sus buenas acciones pero hay un problema se apasiona tanto con la idea de ser santo que se sacrifica dándole su comida a los mendigos, regalando su colcha y de esta forma estar expuesto al frío, etc. Domingo comienza a toser fuerte. El Padre Juan se da cuenta que el muchacho aun no comprendía lo que alguna vez le dijo sobre la santidad. Conversa con Domingo, sin embargo quizá ya sea muy tarde.

Basado en la vida real de Domingo Savio, un adolescente de 14 años que vivió en la Escuela de Don Bosco. El Papar Pio XII lo proclamo santo el 12 de Junio de 1954. Película con la destacada actuación de Javier Echevarría y Emanuel Soriano.

Paco Yunque

(Producción y Realización por Ernesto Girbau – Perú )

Paco Yunque (Alberto Atalaya) llega a su nuevo colegio, de la mano de su madre. Es tan tímido que sus cuadernos los pega a su pecho para protegerse. En el patio, los demás niños se ponen a examinarlo. Dos de ellos lo agarran, uno de cada brazo, y lo llevan al salón de clase. El Profesor (Timoteo Rodríguez) entra al aula y todos los alumnos se ponen de pie. Va donde el “nuevo” y le pregunta como se llama. Luego les dice a los chicos que se sienten y empieza la clase.

La carpeta es bipersonal, así que la comparte con Paco Fariña (Neyer Cerna). Su tocayo le dice que no tenga miedo, que ellos dos van a compartir juegos. En ese instante llega Humberto Grieve (Georges Flores) que es el hijo del rico del pueblo. El profesor le pregunta porque llego tarde y él le dice que porque se quedo dormido. El profesor le indica que vaya a su asiento. Al rato llega otro muchacho que llego tarde, pero que no es hijo de ningún rico, y el profesor lo castiga de inmediato enviándolo a un rincón del salón para que este parado por una hora.

Los Pacos conversan:
Paco Yunque: Yo vivo con mi mamá
Paco Fariña: ¿En la casa de Humberto Grieve?
Paco Yunque: Si, es una casa muy bonita. Ahí esta la patrona y el patrón. Yo estoy con mi mamá, vivo con mi mamá. Mejor es que me vaya a la carpeta del niño Humberto.
Paco Fariña: No seas tonto, no vayas. El profesor te va castigar.

La mamá de Paco Yunque es la sirvienta de la casa de Humberto Grieve, por eso este último se burla de Paco en clase, le jala el cabello, lo jala del brazo, le pega, etc. El pobre Paco bota lágrimas de los ojos, se siente impotente. Lo peor es que el profesor a quien llama la atención es a Paco, no a Grieve. Según el profesor todos los niños son iguales, tanto los ricos como los pobres. Pero eso es mentira, todos en clase saben que el profesor castiga a todos menos a Grieve.

En el recreo, Grieve humilla a Yunque golpeándolo. Fariña le dice que se desahueve y lo reta a pelear. Se enfrentan a golpes, los demás niños también empiezan a golpearse. Se arma una trifulca tremenda. Lo peor ocurre cuando Yunque regresa a su aula, Grieve ha hecho algo que va provocar un mar de lágrimas en el pequeño muchacho.

Paco Yunque es un cortometraje basado en el cuento del escritor César Vallejo. La historia muestra lo abusivos que pueden ser algunos niños con otros más desvalidos en el colegio. El cuento es de hace más de un siglo, pero hoy en día la situación sigue igual. Sólo que ahora le han puesto nombre, le llaman bullying.

viernes, 6 de mayo de 2011

Perú visita Perú - Marca Perú

(Dirigido por Ricardo Maldonado – Perú 2011)


Ser peruano da suerte



Existen muchos lugares en el mundo cuyas ciudades llevan el nombre Perú. En Estados Unidos, por ejemplo, en el estado de Nebraska hay una ciudad llamada Perú de 569 habitantes. Tienen su banco “peruano”, su escuela “peruana”, su alcaldía “peruana”, etc.

Los “peruanos” de Nebraska tienen un gran problema, son “peruanos” pero no saben que significa serlo.

Un grupo de peruanos tiene la gran idea de promocionar nuestro Perú. En un bus rojo con la marca Perú (la que asemeja a las Líneas de Nazca) llegan a este pueblo de Nebraska: Gastón, Christian, Carlos, Gonzalo, Magaly, Rafo, Dina, Sofía, Gabriel, Juan Diego, Iván y Javier. Lo primero que se dan cuenta es que todo esta en silencio. La gente esta guardada en sus casas, observando a los nuevos que han llegado con mucho ruido y animosos. Los peruanos llegan con comida, Magaly ha traído su perro calato, Perú Negro está con el cajón sonando, Carlos lleva algo en su batea seguro una chelita camuflada, Sofía y Gabriel también llevan bateas pero de artesanías peruanas, Dina llega con el arpa y unas bolsas con el símbolo Perú. Gonzalo es el último en bajar, ve que ya todos se le adelantaron, mira hacia todos lados, se paltea y corre en busca de sus amigos.

Ya juntos todos, Christian, micrófono en mano les dice a los “peruanos de Nebraska”: ¡Ustedes son de Perú, tienen derecho a comer rico!
Los “peruanos de Nebraska” los miran con desconfianza inicialmente, luego algunos empiezan a sonreír cuando escuchan que tras el micrófono empiezan a sonar los nombres de: Anticucho, Cebiche, Papa Rellena, Papa a la Huancaína, Ocopa, Ají de Gallina,Yuca Frita, Chicha Morada. Es más se acercan a las mesas metálicas rodantes que se desplazan llevando la comida de nuestro Perú. Y empiezan a comer. La Inca Kola les sabe a Bubble Gum (je je). Un “niño peruano nebraskino” mezcla su inca kola con chicha morada y obtiene un nuevo e inolvidable sabor. Al rato dice: It’s good.


A Sofía se le ocurre cambiar la mostaza y el Ketchup por ají y rocoto. Cuando un tipo entra al Restaurante y esta por comer su hamburguesa, observa el ají y el rocoto, los huele. Al rato se los echa a su pan. Instantes después su boca esta quemando.

Dina piensa que sería bacán difundir el huayno. Se presenta en un local a una cuadra del Peru State College y se manda con una canción de amor cuya letra dice: “En tu camino yo he sido una más, ay yo no se como tú pudiste traicionarme con tu falso amor”. Uy curuju las canciones de amor en los huaynos tienen una letra como las románticas-pop de los gringos, es decir, tristes decepciones amorosas. No es por nada pero eso vende, a muchas personas les gusta ese tipo de letras.

Gabriel motiva a los “peruanos nebraskinos” a surfear, a correr buenas olas, a correr la izquierda más grande del mundo, a meterse unos tubasos. La gente se entusiasma, ya pareciera que todos quisieran practicar el surf.

Carlos le intercambia al sheriff unas donuts por unos picarones. Ambos se chupan los dedos. Perú Negro y su cajón hacen bailar a los “peruanos nebraskinos”. Rafo llena la biblioteca de la Escuela con libros del poeta César Vallejo, las recetas de Nicolini. A Rafo también se le ocurre hacer juegos, pero no en la Escuela. Se va a la calle y ahí hace una tómbola con un cuy. La ganadora recibe un Ekeko en miniatura de premio. Christian se lanza a preparar hamburguesas de alpaca. Gabriel esta vez se pone a vender marcianos de lúcuma en las calles. Por la noche, junto con Sofía se ponen a preparar el rico anticucho. La gente hace cola por su palito.

Esa misma noche Gastón, Christian, Magaly disfrutan un cabrito a la norteña en una casa llena de calor peruano. Al otro día Gonzalo se manda con una pachamanca. No es por nada pero no hay nada como sentirse orgulloso de lo peruano. La gente pide un repeticua.

Juan Diego canta “Del puente a la Alameda” y lo escuchan todos los “peruanos nebr
askinos”.

Es hora de partir, la única manera de que todo el mundo sepa que los peruanos somos lo mejor de lo mejor es demostrándolo en cada uno de nuestros actos y desde el lugar donde actuemos, laboremos, soñemos, nos esforcemos.


Siete Semillas

(Dirigida por Daniel Rodríguez Risco – Perú 2016) Ignacio (Carlos Alcántara) es el gerente general de una de las mejores empresas t...